Personaje

Xuan Lan, una auténtica gurú del yoga

Fucsia, 7/3/2023

Hablamos con la experta en esta práctica y autora del libro ‘Yoga para mi bienestar’, quien nos brindó consejos sobre meditación, alimentación y relajación.

Xuan Lan instructora de yoga
Xuan Lan instructora de yoga - Foto: Instagram Xuan Lan

Xuan Lan, es una economista vietnamita nacida en París y que reside en Barcelona, dejó atrás su trabajo como empleada de banca para ser instructora de yoga. Y es que este ejercicio llegó a su vida de forma casual. Fue durante su estancia en Nueva York cuando hizo su primer acercamiento, como hobby, tras las jornadas de trabajo.

Se inició en el Ashtanga Yoga y lo practicó durante más de 10 años, pero con el tiempo evolucionó hacia un yoga más dinámico, así que se formó en Vinyasa, Jivamukti, Dharma yoga o yoga para trauma.

En los últimos meses ha inspirado a miles de personas desde su casa. Asegura que ha merecido la pena por reunir a miles de personas practicando yoga a la vez y ha fundado una plataforma, con vídeos y consejos para incorporar el yoga y la meditación en el día a día. Fucsia habló con ella sobre el yoga y la importancia de este en la vida de las personas.

Fucsia: ¿En qué momento de su vida comenzó su conexión espiritual que la llevó a ser hoy una experta en el yoga?

Xuan Lan: Empecé a hacer yoga hace más de 20 años en Nueva York, con un tipo de yoga que se llama Ashtanga, es una práctica en silencio que nos permite conectar con el cuerpo, las sensaciones y la respiración, que me parece una muy buena herramienta para hacer esta primera conexión espiritual, no fue algo con lo que de repente me conecté, sino que fue poco a poco gracias esta práctica en silencio muy enfocada, como si fuera una meditación en movimiento.

Es gracias a 7 años de práctica regular, casi diaria de este método de yoga que me ayudó a la conexión espiritual, es verdad que existen otros tipos de yoga más terrenales y físicos, enfocados en escuchar a un profesor con música, pero quizás así me hubiera costado más lograr esta conexión espiritual con el yoga.

F.: ¿Qué es exactamente la meditación y por qué hay una tendencia a pensar en esta práctica como algo místico?

X.L.: Si miramos la definición de místico está relacionado con la espiritualidad, algunos le añaden algo más de magia pero no hay, la verdad es que la meditación hace muchos años podría parecer algo mítico porque no se veía ni se sabía lo que pasaba en el cerebro; hoy en día con la neurociencia y con muchos estudios científicos que se han llevado a cabo en los años 80 en los Estados Unidos en meditadores, han visto la actividad cerebral y cómo se diferencia la actividad cerebral de una persona normal frente a una persona que medita mucho y las zonas del cerebro que se activan que son las zonas de la compasión, de las emociones positivas, entre otras. Esto hace que hoy en día la meditación no sea algo místico ni algo escondido del mundo terrenal, sino que es algo que se puede demostrar científicamente. En conclusión, la meditación es un entrenamiento para observar los pensamientos, logrando estar más conscientes de lo que hacemos y de lo que pensamos.

Existen muchos tipos de meditaciones con distintos objetivos, la que yo práctico es la meditación de la atención plena, hace lo que explica esta palabra, estar atento, pues hacemos muchas cosas con automatismos sin pensar, actuamos basándonos en educación de automatismos, hábitos o rutinas, haciendo que pasemos sin darnos cuenta al lado de cosas importantes en la vida. La meditación nos permite volver a observar y estar consciente de lo que está pasando a nuestro alrededor y también en nuestro interior.

F.: ¿Cree que el yoga es beneficioso para todo el mundo?

X.L.: Sin duda, el tipo de yoga que vemos actualmente mezcla las posturas con la meditación y la respiración es un yoga físico, mental y espiritual, que no ha parado de crecer en Estados Unidos desde los años 70, es beneficioso para todo el mundo porque existen distintos tipos o métodos de yoga para todas las necesidades. Hay tipos de prácticas para todas las edades, para niños, para madres y bebés con prenatal, para deportistas, para personas que quieren desarrollar más la parte espiritual o energética, para gente mayor que necesita mover el cuerpo y sentir la conexión que han perdido con su cuerpo por la edad, por esto me parece que todo el mundo se puede beneficiar del yoga y en el aspecto más físico las personas que inician en el mundo del yoga se dan cuenta de que es mucho más profundo que solo un estiramiento físico.

F.: Se puede decir que una práctica regular de yoga te lleva a ser consciente de tomar alimentos más acordes con la práctica, pero ¿en qué sentido? ¿Es una cosa consecuencia de la otra?

X.L.: El yoga y la práctica regular de yoga, nos ayuda a estar más conectados con nuestro cuerpo, mente, pensamientos y emociones, esta conexión nos permite observar si un alimento nos sienta bien o mal muchas personas ingieren sus comidas sin pensarlo porque siempre han comido lo mismo, lo hacen de manera automática, pero puede ser que este alimento te dé sueño, estreñimiento, hinchazón o malestar. El hecho de hacer yoga regularmente y sentir el efecto de nuestra alimentación hace que la cambiemos y la adaptemos para sentirnos mejor.

F.: ¿Hay que ser flexible para comenzar a practicar yoga?

X.L.: Esto es un error, una idea preconcebida de muchas personas que están acostumbradas a mirar posturas de yoga muy complejas y acrobáticas en las redes sociales; pero es todo lo contrario, es una técnica que junta cuerpo, mente y espíritu, en donde la flexibilidad no tiene nada que ver. Es cierto que recuperamos una cierta flexibilidad del cuerpo, que perdemos con la edad adulta y el estilo de vida sedentario que llevamos en los países occidentales, sentados en el carro, en el trabajo delante del ordenador o en casa en el sofá, ya que hay posturas y movimientos de estiramiento, pero no es para nada un objetivo ni una necesidad.

Para empezar a practicar yoga no hace falta ser flexible, sólo se necesita tener la intención y encontrar un poco de tiempo en nuestra agenda para crear una rutina y un hábito de una práctica regular de dos o tres veces a la semana.

F.: ¿Es posible lesionarse en la práctica de yoga?

X.L.: Por supuesto, la práctica de yoga incluye una parte corporal física de posturas y el cuerpo tiene sus límites, el problema está en que si no calentamos lo suficiente nos podemos lesionar como cualquier deportista, también haciendo posturas demasiado complejas cuando el cuerpo no está preparado para estas, es muy común que el ego nos empuja a hacer posturas que no somos capaces de hacer o que nuestra estructura ósea y muscular no está hecha para esto. No nos podemos comparar con los demás, pues todos tenemos distintos hábitos, rutinas, alimentación, vivimos en países con diferentes características como el clima, la densidad, humedad, etc.; para avanzar, es muy importante la conexión entre el cuerpo y la mente, es un momento de observación, de autocuidado y de ser conscientes a la hora de mover el cuerpo en ciertas posturas.

F.: Un mito bastante extendido es que no es recomendable practicar yoga durante el embarazo. Sin embargo, muchos expertos aseguran que hay que mantenerse activas en este proceso. ¿Qué nos puedes comentar acerca de esto?

X.L.: No sabía de este mito, personalmente siempre he oído hablar de los beneficios del yoga durante el embarazo; por supuesto, la recomendación es no practicarlo durante el primer trimestre en caso de embarazo con alto riesgo. Pero existe un tipo de yoga que se llama prenatal muy adaptado a la gestación y justamente en mi plataforma, tengo un programa de yoga prenatal que está realizado por una profesora especializada.

El yoga tiene muchos beneficios para las mujeres en estado de gestación, por ejemplo, disminuye el dolor de espalda, ayuda a dormir, mejor conexión con el bebé, observar conscientemente los cambios en el cuerpo, ejercicios de respiración que van a ayudar al momento del parto. Es muy importante que una persona que nunca ha hecho yoga antes, haga solo un yoga prenatal que es más suave y tranquilo, permitiendo al cuerpo moverse en muchas direcciones de manera más pausada con la respiración.

Existen estudios que han demostrado que la meditación ayuda a la mamá a vivir esta etapa de su vida de otra manera, conectando mejor con su hijo y también que el bebé se desarrolla mejor gracias a la meditación de la madre.

F.: ¿Qué consejo les daría a las personas que nunca han practicado yoga?

X.L.: Para practicar yoga hay que tener la intención de cuidarse, de pasar tiempo consigo mismo, de encontrar tiempo durante la semana para hacer una práctica regular, esto es lo primero, luego se debe estar abierto a los cambios y a la autobservación de lo que puede pasar durante la práctica. Muchas personas aseguran que gracias al yoga duermen mucho mejor, se alivian de los dolores de espalda, se sienten más tranquilos o experimentan cambios emocionales y de actitud frente a la vida, que surgen a raíz de la práctica regular.

Para cualquier persona que quiera empezar a practicar yoga sólo debe conseguir un tapete, encontrar tiempo en su agenda, estar abierto y buscar clases de principiantes, cosa que tengo también en mi plataforma un programa de iniciación para arrancar poco a poco a sentir la conexión de la que hemos hablado, con una respiración fácil y ya luego podrán seguir con su camino.