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Louis Vuitton lleva la elegancia a casa
En el majestuoso Palazzo Serbelloni, la marca amplía su emblemática colección Objets Nomades, fusionando diseño contemporáneo con el legado histórico.

En la intersección entre el arte, el diseño y la herencia, Louis Vuitton vuelve a capturar la imaginación del mundo durante la Milan Design Week 2025. Esta vez, lo hace ampliando su universo doméstico con una colección para el hogar que va más allá del objeto y se instala en el estilo de vida. El Palazzo Serbelloni, joya neoclásica en el corazón de Milán, se convierte en un escenario inmersivo donde la historia de la Maison se despliega en formas, texturas y colores.
Es un espacio donde cada sala cuenta una historia, cada pieza respira sofisticación, y el savoir-faire dialoga con la contemporaneidad en una narrativa visual tan poética como funcional.

Desde la introducción de los Objets Nomades en 2012, Louis Vuitton ha venido explorando el diseño como una extensión natural de su herencia en la marroquinería. Pero en 2025, esa exploración se vuelve aún más ambiciosa. La nueva línea de Colecciones para el Hogar incluye mobiliario, luminarias, textiles, vajillas y objetos lúdicos que transforman el día a día en un gesto estético. Diseñadores como India Mahdavi, Patricia Urquiola, Charlotte Perriand, y Cristián Mohaded aportan sus visiones singulares para dar forma a un universo que es tan acogedor como provocador. Cada elemento —desde una lámpara suspendida hasta un mueble en marquetería— es testimonio de una búsqueda constante por la belleza útil.

La experiencia se vive como una caminata entre sueños. La visita al Palazzo es una invitación a perderse en escenas cuidadosamente compuestas: mesas de ónix que sirven banquetes imaginarios, armarios que se abren como cofres de tesoros cotidianos, y objetos que coquetean entre el arte y la funcionalidad. La Maison au Bord de l’Eau, recreación fiel del diseño de Charlotte Perriand, se erige como un símbolo poderoso: el diseño como refugio, como manifiesto, como acto de compartir. A través de estos escenarios, Louis Vuitton reafirma que su dominio del lujo no está en el exceso, sino en el detalle minucioso y la emoción que este provoca.

Louis Vuitton no solo diseña muebles, crea atmósferas. Y al hacerlo, propone una nueva manera de habitar el mundo: una en la que cada objeto tiene un alma, cada material una historia, y cada espacio la capacidad de emocionar. La colección para el hogar 2025 no es solo una expansión del legado de la Maison; es una invitación a vivir con intención, rodeados de belleza, audacia y memoria.