La plataforma transforma la experiencia del viajero al integrar masajes, faciales y servicios de belleza como parte esencial de cada estadía.
Viajar ha dejado de ser una simple pausa en la rutina. Hoy, más que nunca, se ha convertido en una oportunidad para reconectar con uno mismo. En los últimos años, el mundo del wellness ha cobrado un protagonismo ineludible: no se trata solo de verse bien, sino de sentirse bien.
Masajes, rituales de autocuidado, clases de yoga, alimentación consciente y experiencias sensoriales son ahora parte del equipaje emocional de los nuevos viajeros, que buscan destinos donde el descanso y el bienestar no sean un extra, sino el centro mismo del viaje.
Esta transformación ha llevado a que hoteles, aerolíneas y plataformas de viajes reinventen su propuesta. La demanda ya no está en lo superficial, sino en lo significativo. Por eso, el bienestar se ha convertido en un lenguaje universal: desde las montañas del Himalaya hasta los lofts urbanos en Tokio, existe un deseo compartido de vivir con más calma, con más intención, y de convertir cada momento del viaje en una experiencia transformadora. En ese panorama, Airbnb vuelve a leer el pulso de una generación que quiere sentirse en casa —cuidada, inspirada y renovada— sin importar dónde esté.
Con su lanzamiento de verano 2025, presenta una nueva era en los viajes. A través de su renovada app, ahora es posible no solo reservar alojamientos únicos, sino también experiencias y servicios de bienestar curados por expertos locales.
Bajo la categoría de servicios, los huéspedes podrán agendar un masaje a domicilio con terapeutas de renombre, faciales con esteticistas certificados o maquilladores profesionales para ocasiones especiales. Además, con las experiencias, se abre la puerta a descubrir una ciudad de forma íntima: una sesión de estilismo con Jamie Mizrahi, un recorrido olfativo por un atelier secreto en Milán, o un encuentro con la gurú de la belleza parisina Garance Doré.
Este movimiento no solo enriquece la oferta de la plataforma, sino que redefine la idea del viaje como una experiencia integral. Al combinar alojamiento, bienestar y cultura local, Airbnb invita a los viajeros a cuidar de sí mismos sin interrumpir su aventura. Ya no se trata solo de llegar a un destino, sino de vivirlo con todos los sentidos. Porque en esta nueva etapa, la hospitalidad se transforma en un ritual de cuidado, y viajar se convierte, finalmente, en una forma de volver a uno mismo.