La colección Pure V se expande con ocho creaciones que reinterpretan el icónico motivo gráfico de la Maison, rindiendo homenaje a la visión vanguardista de Gaston-Louis Vuitton y al refinado lenguaje del Art Déco.
En el corazón del París de 1925, Gaston-Louis Vuitton dejó su huella como figura destacada de la Exposición de Artes Decorativas, capturando el espíritu del Art Déco con líneas geométricas, vitrinas estilizadas y una visión estética que se adelantaba a su tiempo. Su monograma personal —una V tricolor— no solo reflejaba modernidad, sino también una profunda conexión con la abstracción y la audacia visual. Ese trazo inicial, cargado de historia y futuro, se ha convertido en una brújula creativa para la Maison, marcando el pulso de su evolución desde entonces.
Esa misma V ha sido protagonista de la colección de Alta Joyería Acte V desde 2014, y en 2021 encontró un nuevo lenguaje visual con Pure V, una propuesta en oro blanco y diamantes que rediseñó el símbolo con una estética más limpia y esencial. Ahora, en 2025, Louis Vuitton presenta ocho nuevas piezas que llevan ese legado aún más lejos. Collares, pulseras, pendientes y un anillo redefinen la relación entre forma, luz y volumen, desafiando las leyes de la perspectiva con una elegancia contemporánea que no olvida su raíz vanguardista.
La nueva entrega de Pure V es, en esencia, una constelación de diamantes excepcionales que convierte cada pieza en un pequeño universo de reflejos. El motivo de la V se despliega en estructuras tridimensionales donde la precisión arquitectónica guía la ejecución, multiplicando los trazos y acentuando el contraste entre superficies pulidas y cortes agudos. Es un juego visual y táctil que se siente tan dinámico como sereno, tan moderno como atemporal.
Entre los detalles más hipnóticos, destacan los collares y pulseras cuyas pirámides geométricas convergen hacia un punto central con forma de V, subrayado por diamantes talla baguette. La articulación minuciosa de las piezas otorga flexibilidad y movimiento, permitiendo que los diseños abracen el cuerpo con una suavidad inesperada. Incluso el anillo, con sus líneas diagonales, parece captar el gesto de una escultura en movimiento, donde el ritmo está marcado por un equilibrio casi matemático.
Esta expansión no es solo una colección, la compañía reafirma su compromiso con la innovación y la excelencia artesanal, dando vida a una Alta Joyería que no teme explorar nuevas dimensiones. En cada diseño, la V se convierte en símbolo de empoderamiento, precisión y belleza arquitectónica.