salud

Cuidados para la piel sensible

Revista Fucsia.com, 21/1/2009

La doctora Edna Rodríguez habló con la Revista Fucsia sobre la manera de desmaquillar y cuidar a diario la piel sensible.

- Foto:

 
Por: Revista Fucsia
 
¿Qué es la piel sensible?

Una reacción cutánea exagerada a diversos factores. Se estima que 50 por ciento de la población la presenta con predominio del sexo femenino. El manto ácido de la superficie de la piel, que cumple una función protectora contra todo tipo de agresiones, se altera y ésta pierde humedad, se vuelve seca y se irrita fácilmente.

¿Qué factores influyen?

Externos como la contaminación, el clima, la humedad, el viento, la radiación solar, la irritación mecánica o química producida por el uso de productos de limpieza agresivos como solventes, jabones detergentes con perfumes y alcohol, una excesiva higiene diaria y algunos gérmenes patógenos; y factores internos como la predisposición genética, la edad, el envejecimiento biológico, el tipo de piel, los cambios hormonales, el estrés sicofísico, algunos medicamentos, enfermedades y la mala alimentación.

¿Qué características presenta este tipo de piel?

Se ve reseca, acartonada, enrojecida e irritada, se siente tirante, especialmente después del baño y es posible que arda o rasque.

¿Qué tipo de limpieza exige un cutis sensible?

La constante exposición hace que la piel facial esté especialmente expuesta al daño oxidativo. La limpieza diaria evita los daños secundarios, reduce la humectación y los lípidos de la piel sensible, que tiende a ser seca y especialmente proclive a la formación de arrugas prematuras. Hay que limpiar el cutis con productos suaves, que mantengan el balance de humectación de la piel y estén libres de perfumes, colorantes y alcohol, que contengan sustancias que formen sobre la superficie cutánea una película protectora hidratante. La rutina de limpieza se debe realizar tanto en la mañana como en la noche.

¿Y el contorno de los ojos?

En esta área la piel es cuatro veces más delicada que en cualquier otra, y usualmente aparecen primero allí las líneas de expresión y arrugas, ya que es especialmente delgada y fácilmente irritable debido al uso de productos cosméticos, de limpieza y cuidado agresivos e inadecuados, lociones para lentes de contacto, exposición a la polución, computadores, calefacción y ciertas enfermedades como la atopía, la rosácea, el síndrome del ‘ojo seco’ y otras.

Para su limpieza y cuidado se recomiendan productos específicos que eliminen el maquillaje y mantengan la hidratación, adaptados al pH natural de las lágrimas (si el producto accidentalmente entra a los ojos no produce irritación), además de libres de perfumes, colorantes y alcohol.

¿Cómo se debe cuidar diariamente la piel sensible?

Con una hidratación compatible con el tipo de piel y sus necesidades, que proporcione la humedad óptima durante todo el día. Se recomienda el uso de hidratantes como glicerina, úrea, isomerina (regulador de la hidratación que retiene el agua en las células de la piel durante 24 horas), acompañadas de regeneradores cutáneos como el dexpantenol y sustancias que mantengan un pH ligeramente ácido de 5, que presente las enzimas y el manto ácido.

¿Algunas recomendaciones?

Evitar la radiación solar, usar protectores solares para piel sensible recomendados dermatológicamente, no usar productos de limpieza agresivos, seguir una adecuada rutina que elimine los rastros de maquillaje y contaminación ambiental sin irritar la piel, llevar una vida sana con una buena alimentación. Igualmente, consultar cualquier inquietud al dermatólogo, ya que existen productos recomendados dermatológicamente y no utilizar muchos productos a la vez para que se facilite identificar cualquier tipo de reacción o si es alérgico a alguna sustancia; y finalmente, una vez encontrado un producto que de buenos resultados, no cambiarlo.