Salud

6 Causas y remedios para la hinchazón estomacal

Fucsia.co, 13/6/2018

Descubre estos consejos prácticos que te pueden cambiar la vida.

Hinchazón estomacal: causas y remedios. (Foto vía Getty) - Foto:

Un estómago hinchado, incómodo y adolorido es un sentimiento demasiado familiar para muchas mujeres. Un día tu barriga se ve plana y tus jeans favoritos se ajustan perfectamente, y al día siguiente apenas puedes cerrarlos. ¡El secreto a la solución es encontrar la causa! Descubre cómo ponerle fin al problema basándonos en los seis detonantes más comunes.

1. Si estás estreñida...
¡Sólo hay tanto que el colon puede hacer! Por eso sin un buen funcionamiento y un embotellamiento no solo se crea tensión en las paredes del intestino; le da tiempo a las bacterias intestinales para fermentarse, generando gases y un reflujo de aire que produce la sensación de presión e hinchazón estomacal.

Solución:

Bebe café. La cafeína puede estimular el intestino y hacer que se mueva, aunque agregar leche puede provocar más hinchazón si eres sensible a los lácteos, por lo que “negro” es la mejor opción. Eso sí, ten en cuenta que en exceso, la cafeína puede deshidratar, y la deshidratación puede frenar todo aún más.

Da un paseo o sal a correr. Aumentar el ritmo cardíaco envía una señal al colon para que se mueva, pues los intestinos, como el corazón, también necesitan del ejercicio para una salud óptima.

Toma un laxante suave. Cuando ninguna de las anteriores funciona y estás totalmente constipada es momento de considerar un laxante suave. Busca fosfato de sodio entre los ingredientes, pues hará que todo fluya fácilmente, y ¡ojo! si una dosis no funciona, no tomes otra, consulta con tu médico inmediatamente.

2. Si comiste en exceso...
Claramente el espacio dentro de tu cuerpo es limitado, por lo que no puedes pretender que tus órganos se estiren y cedan cuando te excedes. Pero ¡ojo! la hinchazón no solo se trata de cuánto comes, o de qué comes, también es importante tener en cuenta cómo lo comes. Si eres de las que come a toda velocidad, ten cuidado, pues estás tragando aire en exceso.

Solución:

Dándose un masaje. Comenzando en el lado inferior derecho de tu abdomen, presiona hacia arriba, hacia las costillas, y luego hacia el lado izquierdo y hacia abajo en forma de “U”, pues el la dirección natural en que se mueven las cosas en el colon. Repite el masaje durante unos minutos y te sentirás menos llena.

Beber té de menta. ¡Tiene propiedades medicinales para el intestino!, facilita el movimiento, relaja los nervios y restablece el equilibrio bacteriano. Realmente es una poción mágica para proporcionar alivio. Considera también que el hinojo y el jengibre, ya sea en té o en suplementos, también puede ayudar.

3. Si comiste algo que tu cuerpo no puede digerir...
Solo porque estés comiendo sano no significa que todo te caiga bien, como por ejemplo los alimentos ricos en fibra dietética para algunas son difíciles de digerir. La fibra insoluble, (que se encuentra en los cereales integrales y en la mayoría de los vegetales) pueden ayudarte a mantenerte constante, pero la soluble (que se encuentra en los frijoles, las legumbres, los frutos secos y las frutas) pueden trancar el colon, haciendo que las bacterias intestinales se fermenten y produzcan gas.

Lo mismo ocurre con los alimentos como la leche, el yogur, los quesos blandos, el trigo, la cebollas, el ajo, el jarabe de maíz alto en fructosa, los dulces sin azúcar, y algunas frutas que para algunas personas se vuelven casi imposibles de digerir y al consumirlas provocan gases, dolor abdominal e hinchazón. (Todo depende de tu sensibilidad).

Solución:

Toma una pastilla anti flatulencias. Estas pastillitas mágicas crean una reacción química que se deshace del gas para que no tengas que esperar a que el aire se mueva a través del colon para sentir alivio (siempre y cuando realmente sean los gases los culpables del dolor y la incomodidad).

Evitando los alimentos que te caen mal. En el momento en que identifiques los alimentos que tu cuerpo no logra procesar, si los eliminas dejarás de sufrir los efectos. Lo mejor es que hagas este procedimiento con un médico.

4. Si tienes la regla...
Durante la segunda mitad de tu ciclo los niveles de la hormona femenina progesterona aumentan, lo que podría contribuir a la retención de líquidos haciéndote sentir hinchada. Este es tan solo uno más de los síntomas premenstruales, que pueden durar unos seis días al mes, especialmente si no tomas pastillas anticonceptivas que regula las fluctuaciones de este hormona.

Solución:

Usa una almohadilla térmica. Así logras calmar la incomodidad de un síntoma que desafortunadamente no se puede controlar.

Aplica aceite de menta. Agregue una o dos gotas del aceite esencial altamente concentrado a una cucharada de tu crema para el cuerpo y úntala tópicamente a tu abdomen.

Practica yoga. Durante estos días es normal que no sientas ganas de realizar un entrenamiento intenso, pero el ejercicio es necesario pues aumenta la circulación y alivia los cólicos y la hinchazón. Por eso el yoga es una opción ideal. Además, los estiramientos y el movimiento también pueden ayudarte a mover los intestinos para aliviar la hinchazón relacionada con el estreñimiento y el gas.

5. Si tuviste un virus estomacal…
Un virus estomacal, una infección bacteriana o el uso de antibióticos pueden alterar el equilibrio bacteriano de tu intestino. Ya sea por un virus o porque estuviste de vacaciones y te expusiste a ambientes, alimentos y agua diferente, al sacudir tu rutina habitual de alimentos y sueño, puede resultar en un estreñimiento y malestar.

Solución:

Toma una píldora probiótica. Tómala diariamente durante hasta dos semanas para ayudar a restablecer el equilibrio bacteriano bueno y malo en el intestino.

Descubre la diferencia entre probiótico y prebiótico.

6. Si estás estresada, ansiosa o deprimida...
Para ninguna es un secreto que nuestro estado mental puede alterar la forma en que nuestro cerebro se comunica con el intestino. Así que el estrés puede afectar la hinchazón, haciéndote más sensible al estiramiento de las paredes intestinales y propensa al dolor visceral.

Solución:

Consulta con tu médico acerca de un antidepresivo de dosis baja. De este modo puedes remediar la falta de comunicación entre el cerebro y el intestino que acentúa tu malestar.

*Si has intentado todo y todavía no puedes vencer a la hinchazón...*
Consulta con un médico para asegurarte de que no sea otra cosa pues aunque la hinchazón es un efecto secundario de comer mal o en exceso para la mayoría de las personas, en casos raros (cuando se acompaña de dolor o pérdida de peso, particularmente en mujeres mayores de 50) , la hinchazón crónica puede ser un signo de cáncer de ovario u otro cáncer abdominal. También puede ser un síntoma de la enfermedad celíaca, la intolerancia al gluten o a otros alimentos.

¡Definitivamente la hinchazón de todas es diferente y por consiguiente también lo son sus causas y remedios!