Camila Avella rompió silencio y habló sobre los reinados con participación de mujeres casadas

María Camila Avella, una talentosa mujer de 28 años de Casanare, se encuentra en el epicentro de un fenómeno que ha sacudido las bases de los concursos de belleza. Esta valiente colombiana, madre, esposa, modelo, presentadora y comunicadora social, ha roto paradigmas y desafiado estereotipos al convertirse en la primera mujer de su departamento en representar a Colombia en el prestigioso certamen Miss Universo.

El camino hacia su reinado no ha sido fácil. Desde su coronación como Miss Universe Colombia, Avella ha asumido una serie de responsabilidades que han desafiado su versatilidad y capacidad de adaptación. Con tan solo unos meses de preparación, se enfrenta a la próxima cita orbital que se llevará a cabo en El Salvador en noviembre.

Sin embargo, detrás de este corto pero intenso reinado, María Camila Avella ha demostrado que la feminidad universal trasciende todas las fronteras. En un evento de Bulova, uno de los patrocinadores del concurso, Avella compartió sus experiencias y aspiraciones como embajadora de la belleza colombiana.

“Represento y dignifico la feminidad universal”, expresó Avella. “Ahora, en mi rol como madre y esposa, he aprendido a ser sensible, determinada y, sobre todo, a tener la capacidad de adaptarme a mis compromisos y representar con orgullo a mi país.”

Avella ha sido una inspiración para muchas mujeres que han enfrentado obstáculos similares. A pesar de que sus sueños de convertirse en Miss Colombia parecían alejarse después de casarse y convertirse en madre, el cambio en las normas del Miss Universo en 2022 permitió a mujeres casadas, con hijos, embarazadas o divorciadas participar en el certamen. Avella no dudó un segundo en postularse y finalmente logró representar a Colombia en 2023.

“Han pasado muchos años en los que nos han encasillado, sugiriendo que estos concursos eran exclusivamente para jóvenes solteras”, comentó Avella. “Pero creo que es un gran avance que se entienda que una cosa no tiene que ver con la otra. Las mujeres casadas, las que somos madres, podemos participar y obtener resultados notables.”

María Camila Avella se ha convertido en un símbolo de empoderamiento y resiliencia, demostrando que no hay límites para lo que las mujeres pueden lograr. Su participación en el Miss Universo es un hito importante en la historia de los concursos de belleza y un testimonio de que la belleza y la feminidad trascienden todas las convenciones.

Avella ha dejado una huella imborrable en la historia de los concursos de belleza al convertirse en la primera mujer casada y con un hijo en representar a Colombia en el codiciado certamen de Miss Universo.

“Indiscutiblemente haber ganado me llena de mucha emoción. Particularmente me siento orgullosa porque este es un logro que he podido alcanzar a través del esfuerzo, pero lo más importante de todo es que no me representa solo a mí, sino que exalta a todas las mujeres colombianas y nos permite creer que todo es posible. Para nosotras, no existen límites”, dijo durante el evento.

Ella no solo cumple con los requisitos tradicionales de belleza, sino que también personifica los valores y la diversidad que representan a la belleza colombiana. Su triunfo trasciende la pasarela y envía un mensaje poderoso de empoderamiento y determinación a las mujeres de todas las edades, estados civiles y orígenes.

Su corona no solo es un logro personal, sino un hito en la historia de los concursos de belleza, demostrando que la belleza va más allá de las convenciones y que las mujeres pueden lograr todo lo que se propongan.