Lanzan en Colombia y a nivel mundial icónica campaña de concientización sobre el cáncer de mama

Según la Organización mundial de la salud cada año en las Américas más de 491.000 mujeres son diagnosticadas con cáncer de mama y casi 106.391 mujeres mueren a causa de esta enfermedad. En Colombia este cáncer continúa siendo el de mayor frecuencia y el que ocasiona el mayor número de muertes.

Una cifra alentadora es que el 90% de los cánceres de mama detectados a tiempo tienen resultados exitosos, teniendo un diagnóstico correcto y temprano además de la realización de exámenes preventivos.

Para contribuir con esta iniciativa a nivel mundial, en Colombia varias compañías se han unido a esta causa, entre ellas Estée Lauder Companies que mantiene su asociación con la Liga Colombiana Contra el Cáncer, donando el 100% de las ganancias de las ventas del producto Advanced Night Repair edición exclusiva que se encuentra únicamente en Blush Bar durante Octubre y Noviembre,, además de impactar en la vida de miles de mujeres en el país proporcionándoles acceso a servicios médicos, charlas de educación y prevención.

“En alianza con la Liga Colombiana contra el Cáncer, aspiramos a impactar directamente en la vida de miles de mujeres en Colombia, proporcionándoles educación y conciencia sobre esta enfermedad. Además, a través de campañas de comunicación y sensibilización, queremos llegar indirectamente a más de 25 millones de personas, reforzando el mensaje sobre la importancia de la salud mamaria y la detección precoz. Sabemos que, con la participación y el apoyo de todos, podremos hacer una diferencia significativa en la lucha contra el cáncer de mama en nuestro país” indica Lorena Salgado, Directora Regional de Comunicaciones y Asuntos Corporativos, Latín América, Estée Lauder Companies.

Pero el esfuerzo no se detiene ahí, la campaña contra el cáncer de mama en Colombia este 2023 se centra en fortalecer tres pilares fundamentales: Prevención, educación y autocuidado.

La prevención del cáncer de mama es esencial porque aumenta las probabilidades de supervivencia al permitir detecciones tempranas. La educación en el cáncer de mama es más que simples datos; es acercarse a la realidad de muchas personas y sus familias. Porque cuando se está informado, no solo abrimos puertas a mejores tratamientos, sino también a corazones que comprenden y acompañan. Y el autocuidado no es solo un chequeo físico; es también escuchar cómo nos sentimos, cuidar lo que comemos, cómo nos movemos, y cómo nos tratamos. Es un acto de amor que no solo puede salvarnos la vida, sino que nos conecta más con nosotras mismas, nos empodera y nos recuerda la importancia de estar presentes en nuestra propia historia.