Belleza

Luces, piel y naturalidad: así es el arte de maquillar desde la casa Givenchy

Nevyn Ramos ha recorrido pasarelas, portadas y liderado incontables entrenamientos alrededor del mundo. En FUCSIA, nos comparte sus secretos de maquillaje.

Nevyn Ramos, Retail Education Manager de Givenchy, explicando los pasos para un maquillaje perfecto
Nevyn Ramos, Retail Education Manager de Givenchy, explicando los pasos para un maquillaje perfecto - Foto: Cortesía Givenchy

En el universo de la moda y la belleza, pocas casas logran mantener un equilibrio casi perfecto entre la herencia clásica y la innovación contemporánea como Givenchy. Su maquillaje no solo sigue las tendencias globales, también las crea. Desde pasarelas en París hasta alfombras rojas en Hollywood, la marca se ha convertido en sinónimo de sofisticación y audacia.

En este contexto, en FUCSIA conversamos con Nevyn Ramos, actual Retail Education Manager de la marca francesa, quien nos revela su visión sobre el arte del maquillaje y el papel que juega la marca en un escenario donde la belleza es cada vez más diversa, experimental y sin fronteras.

Desde Santa Marta hasta Miami, el camino de Nevyn ha sido un viaje marcado por el arte, la disciplina y una profunda sensibilidad hacia el rostro humano. Su historia une la pintura con la piel, el marketing con la sensibilidad artística, y revela que el maquillaje no es disfraz sino verdad: un lenguaje de cuidado, identidad y libertad.

El maquillaje vive hoy un momento de transformación: la naturalidad convive con la maximalización, el clean look coexiste con los delineados gráficos y las pieles luminosas con acabados mate de alta duración. Las redes sociales han acelerado la difusión de microtendencias, mientras las casas de maquillaje de lujo (como Givenchy, Dior o Chanel) se consolidan como guardianas de la elegancia atemporal, pero también como catalizadoras de nuevas estéticas.

Asesoría profesional de maquillaje conducida por Navyn Ramos, Givenchy
Asesoría profesional de maquillaje conducida por Nevyn Ramos, Givenchy | Foto: Cortesía Givenchy

En medio de este escenario, Nevyn explica que Givenchy apuesta por un lenguaje visual en el que la piel es protagonista absoluta. “Lo más importante es la preparación de la piel, porque de eso depende cómo se verá el maquillaje final. La piel es el lienzo”, afirma con la convicción de quien entiende que el verdadero lujo está en la naturalidad bien construida.

“Soy artista desde pequeño, siempre pinté. Mi especialidad era el cuerpo humano, pero mi debilidad eran los rostros”, recuerda. Esa inclinación por la luz, las sombras y las proporciones lo acompañó cuando estudió Marketing y Publicidad en Colombia, y más tarde cuando ingresó al mundo de los grandes retailers de belleza.

Esa filosofía conecta con una tendencia mundial: el skin first, una corriente que prioriza la salud y el glow de la piel antes de cualquier color o efecto. Givenchy responde a este movimiento con bases ligeras, texturas luminosas y productos de skincare-makeup híbridos, pensados para resaltar y no para ocultar.

Pero si la piel es el punto de partida, los ojos son el escenario del atrevimiento. Nevyn lo sabe bien: “El delineado gráfico es de mis favoritos. Jugar con formas, colores o acabados da carácter y estilo sin necesidad de mucho más”. Y no es casualidad. A nivel global, los delineados disruptivos (desde el floating eyeliner hasta el doble cat-eye) se han consolidado como statement looks en pasarela y en street style. Givenchy abraza esta tendencia con fórmulas precisas, colores intensos y acabados que desafían lo convencional.

Nevyn Ramos, Retail Education Manager de la Casa Givenchy
Nevyn Ramos, Retail Education Manager de la Casa Givenchy | Foto: Cortesía

Al hablar de labios, Nevyn se inclina por un enfoque dual: sofisticación en los rojos intensos y frescura en los tonos nude. “Un labial rojo siempre será un clásico, pero un nude bien elegido puede elevar un look con la misma fuerza”, asegura. Esta dualidad refleja un momento cultural donde el maquillaje oscila entre la búsqueda de poder y la celebración de lo sutil.

La creación de un maquillaje para una pasarela o campaña es un proceso también minucioso. Ramos lo describe como un ejercicio colectivo pero cargado de libertad creativa. Primero, están las reuniones con diseñadores y equipos de marketing. Luego, la interpretación: “Identifico qué transmite la ropa, sus colores, si es dramática, sofisticada o atemporal. El maquillaje debe acompañar, no opacar. Siempre busco resaltar rasgos clave, traducir la marca en piel, ojos y expresión. Y tengo la fortuna de que me permitan entrenar previamente a los makeup artists, enseñarles el look, asegurarme de que todos hablen el mismo lenguaje estético”.

Más allá de las pasarelas y los íconos, Nevyn tiene un mensaje para quienes cada mañana nos enfrentamos al espejo, y habla de errores comunes que delatan una falta de autoconocimiento: “Tenemos miedo a los tonos bronceados porque creemos que todos somos blancos. No nos damos el tiempo de probar diferentes bases para descubrir nuestro tono real, o compramos una base mate para piel seca y decimos que la marca no sirve, cuando en realidad fue una mala elección”. El lujo se trata de asesoría personalizada, “que uses el producto correcto para tu piel”.

Nevyn Ramos, Retail Education Manager de Givenchy, asesoría profesional.
Nevyn Ramos, Retail Education Manager de Givenchy, asesoría profesional. | Foto: Cortesía Givenchy

Su consejo es tan técnico como vital: perderle miedo al tono y brillo natural. “En Latinoamérica tenemos la obsesión de empolvarnos todo el día, cuando la piel joven es luminosa, glowy. Hay que aprovechar ese glow, esa frescura. A mí me encanta que la piel se vea jugosa, que respire. Esa es la verdadera sofisticación”.

Hoy, su rol en Givenchy va más allá de entrenar equipos en skincare, maquillaje y fragancias. Es custodio de una visión que diferencia a la casa francesa de otras: “Su verdad, su genuino discurso. Givenchy es inclusiva desde 1952; fue la primera marca que utilizó modelos de piel oscura en pasarela. No es inclusión de moda ni publicitaria, es un compromiso real. Queremos que cada persona se sienta cómoda, elegante y auténtica. Nuestras fragancias y productos son libres de género; nuestras campañas siempre reflejan diversidad cultural y de tonos de piel. No seguimos una tendencia: mantenemos la misma voz desde nuestro origen”.

Entre los referentes que sueña con maquillar está Rooney Mara, actriz de Hollywood y musa de Givenchy para la fragancia L’Interdit. “Ella es el epítome de una belleza atemporal, extraña y clásica a la vez. Moriría por trabajar con ella, sería un sueño creativo”.

Así, entre el arte del maquillaje y el discurso de Givenchy, Nevyn Ramos se posiciona como un narrador de rostros, un traductor de identidades. Su historia demuestra que el maquillaje no es disfraz, sino una declaración de autenticidad. Y en cada trazo, en cada piel que toca, lleva consigo la fuerza de quien entendió que el verdadero lujo no está en lo superficial, sino en lo genuino.